Para todos los aficionados a la historia contemporánea del norte de Aragón, Siétamo es un lugar especial, pues este pueblo fue el lugar clave de las primeras semanas de guerra en la provincia de Huesca y en su «dominación» se pusieron todas la fuerzas y anhelos de dos formas totalmente distintas de entender la sociedad, lo que dio lugar a una guerra civil en la que el pueblo quedo deshecho en las cuatro veces que cambio de dominador y cuyas cicatrices aun se pueden observar.
Primeros momentos
Nos pusimos por tanto manos a la obra para intentar recordar su pasado a la gente del pueblo, contactamos con el ayuntamiento y tuvimos una enorme suerte, Carlos, el concejal de cultura respondió a nuestra llamada con una muy buena predisposición, en busca de un complemento cultural para sus vecinos y desde ese momento la sintonía fue total, tanto con él como con la corporación municipal.
Pero, ¿como lo vamos a hacer?, ¿como lo enfocamos?
En los sitios que fueron primera línea de frente, a pesar de los casi 84 años transcurridos aun quedan recuerdos dolorosos, sobretodo en las personas mayores por lo que decidimos ser muy cuidadosos, la primera toma de contacto debe ser precavida hasta ver la respuesta de los vecinos y sobretodo, debemos ser totalmente objetivos, usando un discurso histórico correcto y sin olvidar nada ni a nadie.
¿Que fue lo que se hizo finalmente?
Gracias al innumerable material fotográfico (especial mención aquí a la fototeca de la DPH cuyos trabajadores nos facilitaron mucho la labor), cinematográfico, material…que hay de la localidad, fue relativamente fácil pensar el que hacer, haríamos una pequeña exposición en el local social, con materiales originales, los recreadores vestiríamos aquellas otras unidades importantes de las que no disponemos uniformes y montaríamos un par de displays que complementarían los documentos, para de esa forma intentar contar el transcurrir desde 1936 a 1938 en Siétamo.
¿Fue entonces solo una exposición?
No, quisimos hacer además algo que no habíamos hecho nunca, una visita histórica guiada por el pueblo, yendo a los lugares exactos de las fotografías y vídeos de la época, para que los vecinos supieran donde estuvieron los parapetos, los cañones, marcas…e incluso las victimas de aquellas batallas por el control del pueblo de agosto-septiembre de 1936.
¿Como respondió el público?
Para ser sinceros esperábamos poca repercusión, en un pueblo de casi 800 personas pensábamos que con llegar a un 10% seria un éxito, pero nuestra sorpresa fue la gran acogida, comenzaron las reservas a las distintas visitas de gente tanto local como de Huesca, Lleida, Monzón, Zaragoza… aumentamos el número de pases pero al final tuvimos que cerrar las citas cuando algo mas de 200 personas se habían apuntado, pues pensábamos que sino la atención individual no sería la adecuada, sintiendo muchísimo el tener que decir «esta completo» pero siendo un pequeño orgullo y porque no decirlo, sintiendo un poco de vértigo para un grupo de recreación como el nuestro que es pequeño y totalmente amateur.
Vale, ¿pero gustó a la gente?
Creemos que si, que los visitantes se fueron con una estupenda idea de lo que es la recreación histórica, llevándose una pequeña reconciliación con el pasado, consiguiendo que se hablara de la guerra civil sin tabúes ni clichés, solo de historia, gente de muy diversa ideología contando la historia de sus familias, sin reeditar viejos rencores, sin juzgar los hechos, solo hablando de su experiencia y llevándonos auténticas sorpresas como los testimonios de gente que vivió en sus carnes esos días, una iniciativa del club de lectura local para leer algún libro sobre el tema… es decir, haciendo que en los que pasaron por allí se despertara la curiosidad por la historia, por averiguar por si mismos lo sucedido, olvidando lo que tenían preconcebido sobre la guerra civil y sobre las recreaciones de ella, lo cual para nosotros es el mayor de los éxitos pues nuestra meta real es fomentar el conocimiento de la misma, así como poner en valor sus vestigios.
¿Habrá más ediciones?
Pues no lo sabemos, deseamos que sí, desde luego por nosotros no quedará el intentar repetir e incluso ir un poco mas lejos generando un espectáculo lúdico-cultural que sea nuestro pequeño grano de arena en la ayuda por la recuperación de la memoria y por el desarrollo rural, pensamos que Siétamo y sus gentes se lo merecen pues nos sentimos muy queridos y valorados entre ellos.
Palabras finales
Nos gustaría cerrar este pequeño resumen de la experiencia dando de nuevo las gracias a todos lo que lo han hecho posible, al Ayuntamiento de Siétamo, a los visitantes que vinieron a vernos del mismo pueblo y de fuera del mismo, a todos los integrantes del grupo de recreación e incluso a nuestras propias familias a las que robamos el tiempo que aquellos que conozcan el mundillo de la asociaciones sin animo de lucro sabe que es mucho.
Gracias a todos, nos ha dejado la experiencia un excelente sabor de boca.
Doy fe, gustó a la gente. A seguir con ese magnífico trabajo.
Una idea genial, no pienso faltar a la próxima edición, el abuelo de mi marido luchó en Sietamo!!
Nos encanta leer comentarios así, Cristina 🙂 Un abrazo, te esperamos con ansia!